viernes, 6 de marzo de 2020

Un hijo ilustre de Burgo de Santiuste; Arcipreste de Hita

Juan Ruiz que fue el nombre que se le asigno en su nacimiento al Arcipreste de Hita, nació en el 1283 y todo indica que nació en Burgo de Santiuste, aunque cualquier dato hay obtenerlo de su obra: EL LIBRO DEL BUEN AMOR.

El lugar de nacimiento está en pleito. Unos designan como lugar Alcalá de Henares (Burgo de Santiuste), otros Alcalá de Guadaira, e incluso el propio Guadalajara; no existiendo pruebas fehacientes de su lugar de nacimiento.

Cualquier dato referido a este personaje  se deduce de su obra, del libro del buen amor

Su obra detalla minuciosamente aspectos de su vida, andanzas, experiencias y las pasiones del poeta.

La existencia real se encuentra en un documento encontrado en Toledo. El documento se refiere a un  hombre llamado Johanne Roderice archipresbitero de Fita, donde refiere que fue testigo en arbitraje que se dio entre la cofradía de clérigos de Madrid y el arzobispo Gimeno de Luna, en el año 1330.

Se cree que su padre, fue Arias González de Cisneros, caballero Palentino que lucho en la guerra de Granada, fue hecho prisionero durante más de 20 años. Su madre se desconoce, ya que se le entrego a su padre una joven cristina de la que no hay dato más, tuvieron incluido a Juan Ruiz seis hijos, todos varones.

Nuestro personaje pasó su infancia y juventud en tierras dominadas por los musulmanes. Fueron liberados en el 1305, fueron recibidos y protegidos por Simón de Cisneros, que era su tío y obispo por entonces de Sigüenza, hombre con influencia en la corte Castellana. Esta influencia del tío es lo que probablemente le permitiera conseguir favores reales, e incluso el nombramiento de Arcipreste de Hita.

Estudio en Toledo, en la escuela catedralicia, a Juan Ruiz se le encargaron tareas de carácter eclesiásticas, por lo que viajo por Guadalajara, Hita, Burgo de Santiuste  (Alcalá de Henares), Segovia y Madrid.

Si se lee el libro vemos que era un hombre apasionado por las mujeres, que siempre estuvo en el filo de la navaja por el poder y las atribuciones religiosas de su cargo, que le imponían mesura y castidad, pero todo apunta que se dejo tentar por asuntos carnales, no desperdiciando ninguna oportunidad.

La fecha su muerte como toda su vida es por deducción, ya que en el 1350 se produjo el cambio de clérigo como arcipreste de Hita. No existe documento que acredite su fallecimiento ni el lugar de enterramiento.

Recomendamos la lectura del libro de este poeta castellano: El Libro del Buen Amor